Firma, aclaración y dni

Como un grupo que se satura de tanto viaje y horas en un cuarto semi cerrado. Como una pareja que se cansa de tantos desayunos sin cena que valga la pena. Como la obra que se ensaya pero no avanza de una busqueda interna. Como una tostada sin manteca y un sombrerero sin el té.

Un poco asi estoy yo con mis pensamientos y con esta materialización de mi mente. Queria que fuera como una canción que podía cantarme tanto solo como acompañado, pero me quede eseprando demasiado la compania. Pongo pausa, cambio el disco y vuelvo cuando tenga mejores consas que escuchar y mas bonitas para tararear.

Metropolitano, sur.

nota: se recomienda antes de leer, hacer una profunda inspiración y continuar en voz alta sin detenerse demasiado en puntos y comas. Por su salud, en algun momento pare, respire nuevamente y retome el rítmo frenetico. Para su comodidad hemos puesto una oración separada del resto... gracias.

"¿Traje el cuaderno? Si, creo que si; nuncalo saque del morral. ¿En que momento empiezo? Tarde." Llevando un par de pesos. Traje para hiper-resfrio, contra todo tipo de dolores. Medios automáticos de pagos. Sindicatos Argentina. Superpanchos Super.Señoras y señores. Mayo del 2006 la fecha de vencimiento al dorso, mantecol de georgalos. "Mucho que escribir, no llego, no soy lo suficientemente rápido. 40 segundos y nadie dice nada, qué raro..." Eh? El Che vive. Panchos, superpanchos. Is a big game. Maldita gravedad. Vota el cambio. Uso exclusivo de empleados. Industria Argentina. Plaza Constitución. RN´R. "Esto puede ser un buen ejercicio, pero nada mais que eso". Degal. Ladet. Yrygoyen. Bocha, CAFE, Luis. Para que todos viajemos mejor. Levade. Cristina Senadora. El porton. El precio mas bajo. terminal de obnibus, venta de pasajes y encomiendas. Avellaneda. Anden 2. Panchería. Fábrica de hielo. Espiritismo. "¿Cuantos años tendrán esos vagones?" Ferrosur. Genstar. Logistica multimodal.

Sigue aunque todos esperen que abandones.

Ponete luz verde. PPR. Capo del sur. Canto, guitarra, bajo, batería. Maxikiosco. Nestor pitrola. Lanus. Panchería. Por un frente 100 % de izquierda. Pepe. homeopatía, productos naturales. Orion. Alfajores Turimar. Yogui. Entrada para obreros. Vota el cambio. A Korn y Ezeiza. Neurus. Policia. Dueño vende. La churrasca. Banfield. oblivion. Euforia. Navidad sin hambre ni presos políticos. Ambrosia. Van a llevar los conocidos shol-mania. Psicología social. Fruticola S.A. Se viene el cambio. Lomas de Zamora. 2 por 5 centavos. Nutre la vida. Para la dama, para la jovencita. Leva a permitir adaptarse a toda medida. Pancheria. Prohibido cruzar las vias. Calentitas y abrigaditas. Anden 6. Metropolitano. Temperley. Pancheria.

pausa=cuadrado+triángulo

Se abre una tapa y con ella un mundo de posibles historias, reales, verdaderas, inspiradas o inventadas. En una cinta rotativa que camina derecho para undirse entre las prensas de un nuevo acorde. Girando interminablemente en un espejo de palabras, en una pasta de sensaciones. Un guiño a los sentidos, un murmullo al tacto y un pacto con los ojos. El sonido que avanza con el mundo pero nos quedan las formas, casi como una metafora del viejo juego. Un cubo y un triángulo, dignos de su polaridad, separados solo por los pares de mellizos. Hoy nos queda jugar a las formas y saber qué entra por el tubo de tres lados y cuando sacarlo de la caja con un solo dedo.

Los años se me pasan. Anteayer la oí caminar en circulos lentos, casi a cuerda; ayer la oí seguir la vereda oscura que sigsagueaba entre engranajes, para volver a oirla girar hoy con puños cerrados mas rápido que con mis padres, en círculos cada vez mas pequeños. Oigo pasar los años, oigo cambiar los años y yo que sigo con mis fichas en mano, jugando el mismo juego. El único que no cambia, el que dice como empezar y como terminar, con mis cubos, mis triángulos y mis esferas.

(Creo que a mi cerebro le queda algo de niño, y como tal se toma unos dias de vacaciones)

Borrador de un pensamiento

Propongo la exitencia de un organismo, algo asi como una entidad diabólica. Sus asañas abarcan un limbo que dicta entre aquella picazón inrascable en la planta del pie al subir al ascensor y/o esa ráfaga helada que nos hiela los huesos subiendo la escalera de la salida de cada subte. Las lenguas (sin juicios de valores) proclaman que es el encargado de detener el tren a distancia suficiente como para que la mujer de pelambre ondulada y de esférica y prominente figura se interponga en nuestra carrera hacia la puerta y desvanezca, a esta altura, cualquier fantasía de viajar sentado.
Por último puedo asegurar que encarna la piel de aquel viajante que aparentemente (para la mirada inoscente) en actitud ingenua, se para en la puerta del colectivo con su mano cerca del tan buscado timbre, y pone rostro sorprendido ante nuestra interrogativa de si realmente no se bajaba en aquella parada que quedó dos cambios y tres cuadras más atras...